sábado, 20 de octubre de 2007

Dama Mortal

Datos

Nombre Original Lady Deathstrike
Nombre Real Yuriko Oyama
Especie Cyborg
Profesión Asesina, dirigente de Oyama Heavy Industries
Lugar de Nacimiento Osaka, Japón
Estado Civil Soltera
Parientes Conocidos Kenji Oyama (padre, fallecido), dos hermanos innominados (fallecidos).
Grupo de Afiliación Antiguo miembro de los Cosechadores.
Primera Aparición DD 197 (como Yuriko Oyama) AF 33 (como Dama Mortal)

Historia

Yuriko Oyama es la hija de Kenji Oyama, un piloto japonés kamikaze durante la Segunda Guerra Mundial, que tenía la cara deformada por las quemaduras sufridas durante su intento de suicidio atacando un barco americano. Más tarde se convirtió en el dirigente de Oyama Heavy Industries. En esa época Yuriko y sus dos hermanos recibian clases privadas de Mary Stryker, la esposa de un soldado americano llamado William Stryker. Kenji estaba traumatizado por su suicidio fracasado y como última consecuencia del mismo hizo cicatrices en el rostro de sus hijos en un ritual. Entonces se transformó en el criminal Lord Viento Oscuro y logró descubrir un proceso en el que era capaz de fundir el adamantium con los huesos humanos. Kenji pretendía crear un ejército japonés invencible que dovolviera el honor a su país, pero sus notas le fueron robadas y tardó años en volver a recrear el proceso. Lord Viento Oscuro envejeció avergonzado de la civilización moderna japonesa. Así planeó asesinar al ministro de comercio japonés, para lo que contrató al mercenario asesino Bullseye y le substituyó varios huesos con protesis de adamantium. Yuriko que odiaba a su padre por haberle marcado la cara y por la muerte de sus dos hermanos, que murieron sirviéndole, ayudó a Daredevil, el aventurero ciego que había viajado hasta Japón persiguiendo a Bullseye. Kira, uno de los soldados del ejército privado de Lord Viento Oscuro, a quien Yuriko amaba, se opuso a sus actos, pero ella no le hizo caso y Yuriko siguió adelante con su plan de ayudar a Daredevil salvándole la vida cuando estaba a punto de morir a manos de su padre, a quien Yuriko mató.

Después de la marcha de Daredevil, Kira se suicidó a causa de la muerte de Lord Viento Oscuro. La muerte de Kira afectó radicalmente a Yuriko, de tal forma que decidió acarrear con la obsesión de su padre. Yuriko estaba convecida que Lobezno había obtenido el adamantium que cubría sus huesos a través del proceso de su padre. Ataviada como una mujer samurai y adoptando el nombre de Dama Mortal condujo a un grupo de hombres que habían sido leales a su padre hasta Canadá donde atacó a Lobezno, pero fue detenida por Heather Hudson, la líder del grupo de superhéroes canadiense Alpha Flight enfundada en su traje de combate de Vindicator.

Ansiosa de buscar venganza, entró en contacto con Donald Pierce, el renegado Rey Blanco del Círculo Interno del Club Fuego Infernal. Pierce la puso en contacto con Espiral, quien transformó el cuerpo de Yuriko en un cyborg curando en el proceso las cicatrices de su cara. Junto a Cole, Macon y Reese, tres ex empleados del Club Infernal, obligados a transformarse en cyborgs a consecuencia de las heridas mortales que sufrieron a manos de Lobezno, se unieron a ella en busca de venganza. Lobezno, ayudado por Katie Power, derrotó al grupo de cyborg dejándolos a todos en muy mal estado.

Cuando Donald Pierce le propuso unirse a los Cosechadores, Yuriko aceptó. Con ellos se trasladó hasta Australia donde invadieron la base de la Patrulla-X en busca de Lobezno. Debido a la ferocidad del ataque los componentes de la Patrulla que en aquel momento se encontraban en la base, se vieron obligados entrar en el Lugar Peligroso para escapar al ataque. Como Lobezno no estaba, los Cosechadores se quedaron esperándolo. No pasó mucho hasta que regresó y consiguieron capturarlo y lo crucificaron. Lobezno consiguió fugarse gracias a la ayuda de Júbilo y a que Dama Mortal lo dejó escapar, ya que quería derrotar a su enemigo en un combate en igualdad de condiciones. Junto a los Cosechadores intentó encontrar la pista de su paradero, por lo que atacaron la Isla Muir pensando que podía haber ido allí. El ataque de los Cosechadores fue repelido por los mutantes del laboratorio de Moira MacTaggert y la Fuerza de la Libertad.

Dama Mortal logró obligar a Pórtico, el aborigen australiano con poderes teleportadores que vivía cerca de la base de los Cosechadores, para que lo llevara donde se encontraba Lobezno. Pórtico hizo retroceder a Dama Mortal, Lobezno y Puck, quien en esos momentos se encontraba junto a su amigo Logan, atrás en el tiempo hasta España durante la Guerra Civil. Allí los dos enemigos se volvieron a enfrentar hasta que el mismo vórtice temporal que los hizo retroceder los trajo de vuelta. En un enfrentamiento posterior, Yuriko descubrió que Magneto le había quitado el adamantium de los huesos a Lobezno, por lo perdió el interés en seguir su caza.

Más tarde, la base de los cosechadores fue invadida por un grupo de Centinelas enviados por Trevor Fitzroy para capturar a Pierce Los Centinelas mataron a casi todos los Cosechadores, pero Dama Mortal consiguió escapar junto a Cylla Markham. Pierce sobrevivió a los graves daños sufridos a manos de los Centinelas y, meses después, reorganizó a los Cosechadores reclutando de nuevo a Dama Mortal para secuestrar a Milo Thurman, un antiguo empleado del govierno que poseía unas inmensas habilidades precognitivas. Pierce intentó transformar a Thurman en un cyborg, pero se topó con Dominó, la antigua amante de Thurman que destruyó la base de los Cosechadores arrojando a Dama Mortal dentro de un calgo proteínico.

Poseída por el espíritu de Ogún, el antiguo maestro de Lobezno, atacó a su archienemigo en contra de su voluntad. Cuando el espíritu de Ogún aprendió de ella como infiltrarse en sistemas informáticos la abandonó. Más tarde, se alió con un grupo terrorista con quienes se enfrentó al Capitán América. Seguidamente un grupo de Centinelas Prime enviados por Dyscordia intentaron apresarla, ya que, sin que ella lo supiera, llevaba en su interior los códigos de un grupo de centinelas de clase Omega más poderosos. Con la ayuda de la Patrulla-X, Dama Mortal derrotó a Dyscordia y sus tropas. Pese a su victoria compartida, Dama Mortal no cejó de oponerse a Lobezno, en esta ocasión apoyada por Rojo Omega bajo la guía de Dientes de Sable. Yuriko y el mutante ruso mutilaron a Yukio, la amiga de Lobezno, y secuestraron a Amiko, su hija adoptiva. Pese a ello, Dientes de Sable los traicionó y se marchó con Lobezno para consumar su venganza dejándolos sin la información que les había prometido.

Más tarde ayudó a William Stryker a escapar mientras era trasladado de una prisión a otra cuando cumplía condena por varios delitos antimutantes. Dama Mortal entregó a Stryker los recursos de su empresa, Oyama Heavy Industries, para que los empleara en su lucha contra los mutantes, sin embargo fue poseída por Paul, una inteligencia artificial que se encargaba de proteger a la comunidad mutante de Mount Haven. Controlada por Paul atacó a Stryker y a la Patrulla-X. Durante la lucha quedó sepultada en las ruinas del complejo donde residía el ordenador central de Paul, pero cuando los mutantes exploraron el lugar únicamente encontraron su brazo cibernético cortado, por lo que muy posiblemente Dama Mortal sobrevivió a las heridas y huyó para contraatacar más tarde.


Descripción

Altura 1,75 m (5'9")
Peso 58 Kg (128 lbs)
Ojos Marrones
Pelo Moreno

Rasgos Distintivos Su cuerpo ha sido transformado por un cyborg.

Nivel de Fuerza Dama Mortal posee una fuerza sobrehumana debido a sus implantes cibernéticos que le permiten levantar un peso máximo de 25 toneladas métricas en condiciones óptimas.

Poderes Conocidos Como consecuencia de sus implantes cibernéticos puede transformar sus dedos en largas garras capaces de romper el acero. Además su resistencia a las heridas se ha incrementado considerablemente, llegando incluso, en una ocasión, a sobrevivir a un destripamiento de Lobezno. Tanto sus garras telescópicas como sus esqueleto poseen moléculas de adamantium.

Dama Mortal es capaz de proyectar cibernéticamente su consciencia dentro de sistemas electrónicos, permitiendo acceder a su cerebro directamente a los bancos de datos de ordenadores. También puede controlar remótamente los sistemas con los que se enlaza.